07 Novembro 2016
Después de más de tres horas de reunión en la Casa de Nariño con Humberto de la Calle, jefe de la delegación oficial, el mandatario reveló que ordenó a su equipo no levantarse de la mesa hasta que se logre un nuevo acuerdo.
La información es publicada por Página/12, 06-11-2016.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, pidió ayer al equipo del gobierno en el proceso de paz con las FARC el “modo cónclave” para lograr lo más pronto posible un nuevo acuerdo que reúna las cientos de objeciones presentadas por quienes rechazaron el pacto en el plebiscito.
Después de más de tres horas de reunión en la Casa de Nariño (sede del gobierno colombiano) con el jefe de la delegación oficial, Humberto de la Calle, el mandatario reveló que ordenó a su equipo no pararse de la mesa hasta que se logre un nuevo acuerdo. “He dado instrucciones para que el equipo negociador trabaje en ‘modo cónclave’ y que alcancemos un nuevo acuerdo de paz lo más pronto posible”, indicó Santos en una corta declaración tras su regreso al país después de cuatro días de visita oficial en Reino Unido.
El presidente, recientemente galardonado con el Premio Nobel de Paz, afirmó que mantendrá abiertos los canales de comunicación con los diversos sectores. “Estoy convencido que lograremos llegar a un mejor acuerdo con las aspiraciones de la Iglesia y la mayoría de los ciudadanos”, precisó el jefe de Estado. Santos también destacó el trabajo arduo que todas las partes han desarrollado en las últimas semanas para reunir en un documento las más de 500 propuestas y opciones discutidas en 57 ejes temáticos. De acuerdo con Santos, esta recopilación hará posible que la discusión con las Farc sea más productiva y organizada, permitiendo avanzar de manera más ágil en el proceso de revisión y ajuste del acuerdo.
El mandatario explicó que las casi 60 reuniones con representantes de todos los sectores de la sociedad que apoyaron o rechazaron el acuerdo de paz dejaron avances significativos sobre temas como la reforma rural integral y en la jurisdicción especial para la paz. Asimismo, reiteró que hay temas menos complejos de resolver frente a otros más difíciles pero sostuvo que todos serán objeto de discusión detallada con las Farc (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia). El mandatario detalló además que le pidió al Alto Comisionado para la Paz, Sergio Jaramillo, viajar a Cuba, sede de las negociaciones, con el ex ministro de Justicia, Yesid Reyes, y el senador Roy Barreras.
Oscar Iván Zuloaga, uno de los líderes del opositor partido Centro Democrático (CD) y promotor del NO al acuerdo de paz, calificó de positivo que Santos haya ordenado a sus negociadores en La Habana no levantarse de la mesa hasta que se logre un nuevo pacto de paz con la guerrilla.
El gobierno y las Farc iniciaron un proceso de paz en noviembre de 2012 en Cuba. El pasado 26 de septiembre Santos y el máximo jefe de esa guerrilla, Rodrigo Lodoño, firmaron en Cartagena de Indias el texto final que luego fue rechazado por una escasa diferencia en el plebiscito del 2 de octubre. El rechazo del acuerdo dejó en suspenso todos los puntos del pacto, entre ellos uno que ya debería estar en marcha para la concentración de los guerrilleros en unas zonas donde deberían permanecer durante medio año, tiempo durante el cual entregarían sus armas a las Naciones Unidas.
Tras el fracaso, Santos convocó a todas las fuerzas políticas para tratar de salvar el acuerdo, especialmente al Centro Democrático, partido de derecha radical que dirige el ex presidente Álvaro Uribe, líder de la oposición y quien encabezó la campaña para que el pacto no fuera refrendado. El gobierno abrió un plazo para recibir las objeciones de los políticos que promovieron el rechazo al pacto de paz. Las observaciones seguirán siendo estudiadas en su totalidad por los negociadores de las FARC. El nuevo acuerdo, que probablemente ya no será sometido a un plebiscito, podría ser implementado por el Congreso, como lo sugirió Santos el miércoles pasado.