El rehén fue identificado como Harley López, de nacionalidad colombiana, informó el alto consejero presidencial para el posconflicto, Rafael Pardo.

Un funcionario de Naciones Unidas fue secuestrado por un grupo disidente de la guerrilla de las FARC en una zona selvática del sudoeste de Colombia, justo en el inicio de una visita delegados del Consejo de Seguridad de la ONU en apoyo al proceso de paz en el país.

El reportaje es publicado por TELAM, 04-05-2017.

La noticia fue revelada hoy por el alto consejero presidencial para el posconflicto, Rafael Pardo, quien aventuró que el rehén, identificado como Harley López, de nacionalidad colombiana, sería soltado este mediodía, pero el mandatario Juan Manuel Santos dijo más tarde que la liberación "podría darse en los próximos días".

López "fue plagiado (secuestrado) por una disidencia de las FARC y ya anunciaron que lo iban a liberar; esta acción es absolutamente inaceptable", indicó Pardo a periodistas.

El funcionario de la ONU fue secuestrado ayer por un grupo disidente de las FARC al mando de alias Iván Mordisco en el departamento Guaviare, en el sudeste del país.

El hecho se produjo en Barranquillita, un remoto caserío situado a dos horas de viaje por tierra del municipio Miraflores, donde López estaba cumpliendo un trabajo.

Por su parte, Santos, al término de la reunión con los integrantes del Consejo de Seguridad en la Casa de Nariño, sede del gobierno, sostuvo que la liberación del funcionario de la ONU "podría darse en los próximos días".

"Ya salió una delegación para el lugar en donde fue retenido el funcionario de la ONU por parte de la disidencia de las FARC para poder devolverlo a la libertad y espero que esté con nosotros en muy poco tiempo", dijo Santos, citado por Caracol Radio.

Elbio Roselli, el embajador uruguayo en la ONU, que preside rotativamente el Consejo de Seguridad, aseguró que las disidencias son normales en un proceso de paz y que ojalá las cosas terminen positivamente.

"Estas son cosas graves, no son inocentes, no sucedió porque sucedió, hay un intención detrás de ese cobarde hecho y simplemente no se va a modificar la actitud y el interés de la ONU y del Consejo de Seguridad de seguir contribuyendo al proceso" de paz, advirtió Rosselli.

El secuestrado López era parte de una comisión liderada por el alcalde de Miraflores, funcionarios de la Dirección para la Atención Integral de la Lucha contra las Drogas del Gobierno Nacional, miembros de organizaciones sociales, juntas de acción comunal y funcionarios de la Onudc (Oficina de Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito).

Estos funcionarios estaban reunidos con cerca de 400 campesinos de la zona para socializar el Programa Nacional de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito (PINS).

Consultado el consejero para el posconflicto por los periodistas acerca de si el secuestro fue una represalia de la disidencia de las FARC por las labores de sustitución de cultivos ilícitos que se realizan en esa zona del país, Pardo explicó que "ellos viven de la droga y quieren vivir de la droga".

"El programa de sustitución de cultivos se hace en desarrollo de los acuerdos con las FARC; por lo tanto, las FARC están de acuerdo y apoyan este programa en los procesos de socialización", precisó, citado por la agencia EFE.

Pardo aclaró que será necesaria una "mayor coordinación" con la fuerza pública para garantizar la seguridad tanto de los funcionarios de la ONU como de todas aquellas personas que participan en el programa de sustitución de cultivos.

El Sistema de las Naciones Unidas en Colombia condenó el secuestro de López y exigió su liberación inmediata.

"El Sistema y todos los y las funcionarias de la familia de la ONU en Colombia manifestamos nuestra solidaridad con nuestro colega y con su familia, cuya seguridad y bienestar son prioritarios; estamos trabajando con las autoridades competentes para su liberación inmediata y segura", precisó un comunicado de la ONU.

El diario El Tiempo precisó que se desarrolló un Consejo extraordinario de Seguridad para evaluar la situación y que Naciones Unidas está al frente del proceso de una eventual liberación del funcionario, tal como lo marcan los protocolos internacionales por tratarse de un miembro de una organismo internacional.

Los miembros del Consejo que ya se reunieron con Santos lo harán con representantes de la sociedad civil, y tienen previsto visitar una de las 26 zonas veredales transitorias de normalización (ZVTN), donde unos 7.000 integrantes de las FARC se preparan para dejar las armas y desmovilizarse.

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